martes, 12 de junio de 2012

A veces miento, para no causar daño. No busco conseguir mi felicidad dando angustia a los demás. Me encuentro sola y me pregunto si tal vez esto es lo que yo merezco. Claro que respuestas no consigo y me deprimo, pensando en el quizás. Quizás sea lo correcto, o tal vez lo hago mal. Quizás solo son conceptos ante mi realidad.Preguntas sin respuestas, y cantos de maldad, una oración yuxtapuesta ante otra con verdad. Cual sería la salvación, si deprimirme no es la solución. A donde correr para ver, si no tengo nada que buscar. Nada que encontrar. O puede ser que lo que busco es seguridad, en mi misma para enfrentar a los demás. Para demostrar que no soy feliz todo el tiempo. Para lograr medir mis conceptos. Los de felicidad, los de mentira, los de preguntarme a mi misma. Hablar con otros, involucrar en mi vocabulario la frase verbal "te necesito" . Puede que no mienta, puede que de verdad sea feliz, y mi sonrisa sea verdadera al fin. Puede ser que mi cabeza dicte a mi cuerpo lo que mi corazón informa. Puede que mi subconsciente muchas veces me juegue en contra. Quien sabe si lo soy, quien sabe si no. Quien puede asegurarme que mi sonrisa miente, o que grita lo que mi alma siente. La felicidad no solo es sonreír, a veces las sonrisas tapan hasta el más grande dolor. A veces lo sana todo una caricia con amor